La Reina de las Hadas se convierte en zombi y, como era un ser mágico, pudo retener parte de su poder mágico, pero se oscureció. Su polvo de hadas ya no brilla, sino que se vuelve gris y puede convertir a cualquiera que toque en un hada zombi. Ha convertido a sus amigos más cercanos y leales compañeros en zombis de cuento de hadas, y nunca la abandonan. Vuelan a su alrededor, protegiéndola. Sin embargo, un minion cuelga de su columna y se come sus alas.