Mi disfraz casero de Jessie de Toy Story fue hecho por unos amigos diseñadores en el trabajo. Hicimos una caja de cartón, recortamos una parte del frente y le pusimos plástico transparente para que pareciera que soy una muñeca en una caja esperando a ser vendida. Nos aseguramos de que hubiera un agujero para la pajita para que pudiera beber, pero para comer, tenía que salir.
Los diseñadores de mi trabajo tomaron algunos de los personajes de Toy Story, los recrearon en una caja, los imprimieron y los colgaron en una pizarra. Luego fui a la tienda de artesanía local y compré un poco de fieltro, lo corté y luego usé un rotulador rojo para que pareciera que estaba cosido. Para el atuendo, traje una peluca de una tienda de disfraces local y me puse una camisa blanca y jeans. Tomé el brazalete, lo envolví en fieltro, tomé una cuerda y la até a la parte de atrás de la caja para que pareciera una cuerda con la que podía hablar.
A todos les gustó el atuendo, quedaron muy impresionados y querían tomarse una foto para mostrársela a sus amigos. Ahora lo que voy a hacer el próximo año, no sé qué será lo mejor.