El año pasado, a mi esposo y a mí nos costó mucho encontrar un disfraz, pero en el último momento decidimos ser un dios y una diosa griegos. Fuimos a WalMart y compramos sábanas blancas, hojas de la sección de flores y cuerda dorada de la sección de manualidades. Al llegar a casa, cortamos las sábanas, nos las echamos encima y las clavamos donde hacía falta.
Mi marido llevaba una camiseta blanca sencilla debajo de la suya. Agregamos cuerda dorada como acentos. Luego usamos una pistola de pegamento caliente para pegar las hojas a la diadema de mi esposo, y usé horquillas para asegurar las hojas doradas en mi cabello. También envolvimos las mangas de la camisa de mi esposo con hojas. Yo tenía un collar de oro, y me quité el amuleto para ponérmelo en mi traje griego casero.
En general, ¡fue un disfraz muy simple y relativamente barato!
