Con la llegada de Halloween, mi mercería local (en Browns Bay, Auckland, Nueva Zelanda) se convierte en mi segundo hogar; donde compro joyas y busco un traje. Pero el año pasado encontré algo completamente diferente.
Mientras miraba a través de los pasillos, vi estas dos caras extrañas que se asomaban de una caja de surtido que sobresalía de debajo de un estante. ¡No pude resistir! Los recogí, me puse uno en cada hombro y me admiré en el espejo. ¡Ideal! – traje tricéfalo. 🙂
Detalles del disfraz de niña de tres cabezas de tres cabezas
- Cuando los llevé a casa, encontré una camisa vieja, les rellené la cabeza con bolsas de plástico (porque son de látex hueco) y las cosí a los hombros. ¡Traje en un abrir y cerrar de ojos! Era cómodo de llevar, fácil de poner y quitar.
- Los usé con pantalones zigzag de 3/4 de largo.
- Apliqué pintura facial (incluso roja en mis dientes, pero se lavó con bastante rapidez) y la pintura facial roja zigzagueó por todos mis antebrazos y espinillas.
Ciertamente llamé la atención sobre mí en los semáforos cuando conducía a una fiesta, y definitivamente me destaqué entre las personas que me preguntaron sobre mis «gemelos»: me preguntaron si nací así y cuáles son sus nombres. «Fideos y repollo» dije!!