Mi esposa siempre se reía de mí porque no sabía quién era Beetlejuice. Así que un día compré una película y la vi por primera vez. Beetlejuice fue mi próximo disfraz, así que le pedí a mi esposa que fuera Miss Argentina. El vestuario salió genial, pero hubo mucho trabajo.
Para Beetlejuice, compré pantalones negros y los pinté de blanco. Compré un traje blanco y lo teñí de negro. Me tomó dos días pintarlo todo. El maquillaje de mi esposa Miss Argentina quedó genial!