Mi hijo Benjamin quería sobresalir entre la multitud en Halloween. En el Reino Unido, Halloween no es tan bueno como en los EE. UU., ¡así que tuvimos que trabajar duro!
Usamos una caja plana grande que nos proporcionó Asda (Walmart) sobre la cual colocamos un mantel de una tienda local de segunda mano. Ambos fueron cortados con agujeros lo suficientemente grandes como para que pasara la cabeza de Benjamin. El plato era un viejo plato de hojalata, en el centro del cual primero se había cortado un agujero para que encajara cómodamente alrededor del cuello de Benjamin. Luego se cortó la pieza trasera para que la pieza delantera pudiera colocarse debajo de la barbilla y la pieza trasera se agregó detrás de la cabeza. Los bordes afilados se protegieron con aislamiento eléctrico de un cable eléctrico.
Luego se completó todo el efecto con maquillaje, sangre artificial, y se decoró la “mesa” y el plato con vasos de gelatina de frambuesa colocados en el refrigerador, velas LED, telas de araña, comida de juguete de goma y manzanas. Causó tal impresión en la comunidad local que salió en los periódicos.
El costo total del disfraz de «Head on a Platter» fue: £5.
