Me encanta diseñar disfraces de Halloween y este año asumí mi mayor desafío hasta el momento. Creé un traje de Groot y Rocket de casi 7 pies de alto que usé todo el día en el trabajo como educadora de enfermería. Usé espuma de proyecto, colchonetas de espuma para bebés, pieles, pintura y una tonelada de pegamento para crear esto. Pasé alrededor de 6 semanas trabajando en la creación y fui desafiado en casi todas las etapas. Usé una mochila, flotadores de piscina y tubos de plástico de mi bolsa de golf para crear altura y estructura para Groot. Usé una camisa de manga larga del armario de mi esposo para crear el cuerpo de Groots, junto con espuma de poliuretano, pintura, hilo y musgo. No soy costurera, pero usé 4 carretes de hilo y cosí manualmente la espuma tanto en la camisa como en los pantalones que usé para Groot.
Creé el cuerpo de los Rockets con nailon (el traje del año pasado) que corté para crear los brazos, las piernas y el cuerpo. Pegué piel sobre nailon para crear su cuerpo. Compré dos pantalones para niños pequeños de buena voluntad. Uno de los pares dice «no lavar», lo cual es alarmante considerando que están hechos para niños pequeños. Lo primero que hice fue lavarlos, lo que les dio un gran color rústico metálico que usé para crear el look de cuero para los cohetes.
Planeé hacer una pistola Rocket con rollos de papel higiénico y toallas de papel, sin embargo, debido a los eventos recientes del 1 de octubre en Las Vegas, dejé esto fuera del diseño final.
Me lo pasé muy bien vestido como Groot y Rocket en el hospital, puse un altavoz en la cabeza de Groot que gritaba «Soy Groot» con solo tocar mi teléfono celular. Recibí muchos gritos y risas durante mi turno de 10 horas. Incluso sin zapatos de plataforma, tenía que recordar agacharme debajo de las puertas: seguía escuchando «zambullirse» justo antes de golpear la cabeza del pobre Grut en los marcos de las puertas. Cuando salí del ascensor, escuché sonidos de sorpresa, miedo y risas cuando Groot salió antes que los demás.
El maquillaje de mi cara se mantuvo bien todo el día, aunque de camino al trabajo se me empañaban las gafas debido al cálido aliento creado por el puente nasal. Estaba muy contento con el resultado de este disfraz de Groot y Rocket, valió la pena toda la sangre, el sudor y las burbujas de pegamento caliente.