Este año tuve una fiesta temática mexicana para mi 30 cumpleaños. Pensé que habría muchos ponchos y sombreros, así que quería usar algo realmente único. Revisé las opciones durante mucho tiempo: chips de maíz, chiles, una lata de salsa y finalmente decidí ir con un disfraz de piñata mexicana. La única razón por la que organicé una fiesta temática mexicana fue porque me encantan todos los colores brillantes asociados con el tema y la piñata fue la forma perfecta de incorporarlos a mi disfraz.
Empecé por conseguir una caja de cartón grande lo suficientemente grande como para cubrir todo mi torso, dejando mis brazos y piernas expuestos. Usé un tazón para trazar y cortar agujeros para la cabeza y los brazos. Luego corté todo el fondo de la caja para poder caminar libremente. ¡Y ahora lo más interesante, colorido y emocionante! Usé unos 24 rollos de serpentina para cubrir toda la caja. Sin embargo, no todos estaban pegados individualmente: tomé un trozo de cinta de embalaje transparente lo suficientemente largo para que la caja fuera ancha y lo pegué con el lado adhesivo hacia arriba en el banco (metiendo los extremos hacia abajo para asegurar la cinta a la mesa).
Luego pegué pedazos de cinta a lo largo de la cinta, comenzando en el borde inferior y terminando en la parte superior de la cinta. Al final, pude colocar alrededor de 8 piezas de cinta en cada pieza de cinta. Luego quité con cuidado la cinta de la mesa y pegué otro trozo de cinta de embalaje (esta vez con el lado adhesivo hacia abajo) encima y lo abrí14; cinta serpentina y la pegó a la caja, trabajando de abajo hacia arriba y haciendo cada lado de la caja por turno. Fue un proceso bastante laborioso, ¡pero valió la pena! Luego hice cortes verticales uniformemente alrededor del perímetro para agregar el efecto de piñata.
Hice la cara de la piñata de cartón. Los ojos están cerrados con serpentina, hechos de la misma forma que el resto del cuerpo. Iba a cubrir mi bigote también, pero no había suficiente tiempo. ¡Agregué un sombrero comprado en la tienda y listo!
En acción, el disfraz se veía increíble si estaba de pie o bailando, ¡pero me resultó imposible sentarme! Aunque, como puede ver en la foto adjunta, ¡fue una buena oportunidad para tomar fotos! Beber y comer también fue un poco complicado, ya que el tamaño de la caja dificultaba llevar las manos a la boca, pero donde hay voluntad, hay una manera, ¡así que lo hice!