Decidí vestirme como Billy Mays hace un año en Halloween 2008. La idea se me ocurrió mientras navegaba por los canales en las primeras horas de la noche y me encontré con numerosos comerciales que presentaban al único e inigualable Billy Mays.
El disfraz de Billy Mays es bastante simple. Lo único que se requería era su viril barba gris de Adams. Así que dejé crecer la mía durante un mes, compré un tinte de barba «solo para hombres» y, para colmo, usé pintura facial normal para rellenar las manchas en la piel y dar la ilusión de una barba negra completamente desarrollada que solo Billy Mays podría hacer… extraer.
La mejor parte fue que nadie sabía quién era yo hasta que di mi nombre y limpié Oxy. No hace falta decir que este ha sido un buen año para Halloween. Billy Mays siempre será recordado.